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domingo, 27 de marzo de 2011

Encontrándonos

El Amor se encuentra amando. 


Igual que te encuentras tú...



Ama sin mirar a quien

“Pero a vosotros que me escucháis os digo: amad a vuestros enemigos, haced bien a los que os odian; bendecid a los que os maldicen y rogad por los que os calumnian. Si amáis sólo a los que os aman, ¿qué mérito tendréis?, pues también los pecadores aman a quienes les aman. Y si hacéis el bien a quienes os hacen el bien, ¿qué mérito tendréis? Por el contrario, amad a vuestros enemigos, haced el bien y prestad sin esperar nada por ello; y será grande vuestra recompensa, y seréis hijos del Altísimo, porque Él es bueno con los ingratos y con los malos.”

Jesús. Lc 6, 27-38

sábado, 26 de marzo de 2011

Gnana Yoga

Gnana Yoga (Jñāna-yoga) o ‘sendero del conocimiento’ es uno de los tipos de yoga mencionados en el hinduismo.

El gnana yoga enseña que hay cuatro medios de salvación:
  • Viveka (‘discriminación’): la habilidad de diferenciar entre lo que es real/eterno (Brahman) y lo que es irreal/temporal (la materia). Este es un concepto importante incluso en textos más antiguos que el Bhagavad guitá, y frecuentemente invocan la imagen de un cisne, que los hindúes creen que mientras bebe puede separar la leche (o el soma) del agua.
  • Vairaguia (sin raga, sin pasión): la práctica de hacer como si no hubiera apego por nada que sea temporal.
  • Shad sampat: (‘seis virtudes’):
    • Śānta (tranquilidad)
    • Dama (control de los sentidos),
    • Uparati (renuncia al placer)
    • Titikṣā (paciencia)[7]
    • Śraddhá (fe ciega)
    • Samadhana (concentración).

  • mumukṣútua (deseo de liberación).

jueves, 24 de marzo de 2011

Si lo aceptas te será útil

Es justo en el instante en que el terapeuta se olvida de juzgar al paciente, que la curación se produce. En ciertas relaciones, nunca se alcanza este punto, aunque ambos puedan cambiar sus sueños en el proceso. Pero no será el mismo sueño para ambos, y por lo tanto no es el sueño de perdón en el cual un día ambos despertarán. El bien es salvaguardado. Pero se ahorra muy poco tiempo. Los nuevos sueños perderán su atractivo temporal, para volver a convertirse en sueños de miedo, que es el contenido de todos los sueños. Así, ningún paciente puede aceptar más de lo que esté dispuesto a recibir, y ningún terapeuta puede ofrecer más de lo que cree tener. Hay pues, un lugar para todas las relaciones en este mundo, y aportarán tanto bien, como cada uno acepte y utilice.

Psicoterapia de UCDM

sábado, 19 de marzo de 2011

Los Siete Rayos

Hace casi un siglo, Alice Bailey empezó a transcribir las enseñanzas de su maestro, Djwal Kool, “el Tibetano”. Dicho maestro le reveló la estructura de todo el universo conocido y desconocido en función de Siete Rayos de cualidades bien concretas. Dichos rayos además de estar presentes en los objetos “inanimados” también determinan los campos de tu personalidad agregada, tu campo mental, emocional y físico. Además de describir las características de estos cuatro campos, va más allá y afirma que tu Alma individual también se ve afectada por la cualidad de un rayo concreto lo cual guarda una relación directa con tu propósito individual.

Rayo I: Voluntad y Poder

Al Primer Rayo se le denomina de Voluntad o Poder porque los seres que pertenecen a él llegan al Poder a través de su fuerza de voluntad. El sendero de este Rayo es el más rápido pero también el más difícil. Hay muy pocos seres humanos actualmente que expresen las cualidades de este rayo porque muy pocos serían capaces de resistir la tremenda energía que supone la expresión del primer Rayo en su estado puro. El hombre de Primer Rayo es un líder, y siempre se le encuentra al frente de la actividad que ha decidido emprender. Es un destructor de las formas cristalizadas. El método característico es la fuerza de voluntad. Estos seres son capaces de "conquistar el cielo por la violencia".

Rayo II: Amor y Sabiduría

El método de este rayo es el de reunir o juntar. Es el Rayo de la dualidad y en él se sintetiza el Amor y la sabiduría. El hombre de este Rayo siempre tiene deseo de adquirir conocimiento puro, independiente del conocimiento adquirido, por eso su mente siempre está dispuesta a escalar nuevas cimas para conseguir más comprensión, más sabiduría. Si no hay amor se vuelve frío y egoísta. Y si falta voluntad es inactivo. La fusión del amor y la sabiduría proporcionan al hombre del Segundo Rayo una inteligencia clara, y facilidad para enseñar a los demás su visión sintética.


Rayo III: Inteligencia Activa

Este es el rayo del pensador abstracto. Rige la filosofía, las matemáticas, la metafísica y también la Astrología. Mediante la imaginación captan la esencia de la verdad; son idealistas, impulsivos, soñadores y teóricos. El hombre de este Rayo debe estar en continuo movimiento y creación cuidando de realizar todo de forma desinteresada. Suelen ser poco prácticos y les encanta regodearse en sus propias acciones y creaciones. Los individuos del tercer Rayo descubren el sendero a través de reflexiones filosóficas pero lo recorren mediante una actitud de entrega y servicio a los demás. 


Rayo IV: Armonía a través del conflicto

Este es el Rayo de la lucha y la inestabilidad porque en él están presentes las cualidades de la actividad y de la inercia. Cuando rige la inercia la persona se siente atraída por las comodidades, arrastrándola a un estado de dejadez. Mientras que cuando están bajo la actividad se convierten en personas de gran valor, efectivas e intuitivas. Suelen crearse situaciones de mucha tensión como consecuencia del enfrentamiento de los pares de opuestos, pero son estas dolorosas experiencias las que les llevan a una rápida evolución. Las personas de Cuarto Rayo aman la belleza, la armonía, el color. Son personas sensibles y cariñosas, pero los continuos cambios de humor hace que algunas veces resulte difícil convivir con ellas.

Rayo V: Conocimiento concreto

Es el rayo de la mente concreta, de la investigación científica. Los individuos de este Rayo aman los hechos. A pesar de que su punto de vista suele ser estrecho, les gusta actuar con lógica. Su principal problema es la rigidez mental, por ello es importante para él aprender a estudiar las cosas libre de todo juicio preconcebido y aceptando el resultado tal y como es. El individuo de este Rayo es el más materialista de todos. El hombre de Quinto Rayo debe aplicar el conocimiento para adquirir fuerza interna y confianza en sí mismo. La disciplina interna y externa le aportan autoconfianza. El método para recorrer el Sendero es a través de la confianza en los demás y en sí mismo. 

Rayo VI: Devoción e Idealismo

El efecto de la actividad de este Rayo durante los últimos dos mil años ha sido entrenar a la humanidad en el arte de reconocer los ideales. A los ojos de las personas de este Rayo todo es perfecto o desastroso; es muy extremista. Sus fines humanitarios les empujan a sacrificarse. Son románticos, y necesitan entregarse a una causa. No son estadistas ni científicos, pero pueden ser magníficos poetas, amantes del arte, o grandes instructores cuando reconocen que sus cualidades pueden ser útiles a los demás. Les gusta pasar desapercibidos y cuando alguien les da una responsabilidad son cumplidores y efectivos. Los individuos de este Rayo recorren el sendero mediante la entrega y el servicio a los demás. 

Rayo VII: Magia y Orden Ceremonial

El hombre de este Rayo se deleita por todas las cosas realizadas en forma decente y ordenada. Se sienten motivados por todo lo que es noble, digno, ordenado. Su meta es hacer lo más conveniente y pronunciar la palabra correcta en el momento oportuno. A pesar de querer aparentar gran fuerza y suficiencia carecen de autoconfianza. Son grandes idealistas y sienten un profundo respeto por la libertad de las personas que junto a ellas conviven. Las personas del Séptimo Rayo son mentalmente abiertas, y aunque les cuesta reconocer sus errores suelen ser dóciles y predispuestas a cambiar su forma de pensar. Algunas virtudes características de los que pertenecen a este rayo son: el poder para crear orden, ritualismo y ceremoniosidad, sentido del tiempo y del ritmo y poder para coordinar grupos

La Gran Invocación


Desde el punto de Luz en la Mente de Dios,
Que afluya luz a las mentes de los hombres,
Que la Luz descienda a la Tierra.
Desde el punto de Amor en el Corazón de Dios,
Que afluya amor a los corazones de los hombres,
Que Cristo retorne a la Tierra.
Desde el centro donde la voluntad de Dios es conocida,
Que el propósito guíe a las pequeñas voluntades de los hombres.
El propósito que los Maestros conocen y sirven.
Desde el centro que llamamos la raza de los hombres,
Que se realice el Plan de Amor y de Luz
Y selle la puerta donde se halla el mal. 

Que la Luz, el Amor y el Poder, restablezcan el Plan en la Tierra. 



La belleza y la fuerza de esta Invocación reside en su sencillez y en que expresa ciertas  verdades esenciales que todos los seres humanos aceptan innata y normalmente: la  verdad de la existencia de una Inteligencia básica a la que vagamente damos el nombre de Dios; la verdad de que detrás de las apariencias externas, el Amor es el poder motivador del Universo; la verdad de que vino a la tierra una gran Individualidad llamada Cristo por los cristianos, que encarnó ese Amor para que pudiéramos comprenderlo; la verdad de que el Amor y la Inteligencia son consecuencia de la Voluntad de Dios, y finalmente de que el Plan Divino sólo puede desarrollarse a través de la humanidad misma.

Alice A. Bailey

 

Joan Melé. Contigo somos + Paz

Joan Mele (subtitulos) Vcontigo somos+paz from Sinergia Medios Audiovisuales on Vimeo.

viernes, 18 de marzo de 2011

Tú no eres eso


Sólo puedes hacerte responsable de lo que no es tuyo. ¿Cómo ibas a hacerte responsable de tu propio Ser? Lo que Eres, es el Responsable.
Eso que no eres tú, debes aceptarlo y transformarlo hasta que se haga parte de ti o desaparezca de tu conciencia.


.

Tienes derecho a los Milagros

Pedir Ayuda, 
te ayudará a Comprehender que somos Infinitos.




Un amor de discernimiento

Lo que hace un buen médico cuando alguien tiene una hemorragia severa, es obviamente ponerle sangre, pero no se queda transfundiendo sangre toda la vida; mientras transfunde la sangre cierra la herida. Si queremos sobrevivir en el plano emocional, además de transfundir energía, valor o ánimo es necesario cerrar las heridas y tratar esas cicatrices profundas y sensibles que aún no acaban de sanar.

Las relaciones humanas no se rompen, se desanudan. Cuando rompemos relaciones algo también se rompe dentro de nosotros: perdemos integridad adentro y afuera, pues nos quedamos con la herida del resentimiento que afecta permanentemente nuestra vitalidad. Si desanudamos con paciencia los lazos que nos une , esos lazos jamás se romperán aunque estemos muy lejos; nos llevaremos el regalo de la lección aprendida más que el sentimiento de fracaso que nos amarra al pasado.

Los resentimientos son cicatrices sensibles en tu corazón que generan úlceras, hipertensión, cáncer, colitis, artritis y muchas enfermedades crónicas. El nombre y apellido de muchas de las enfermedades que vemos en la práctica clínica es resentimiento, o sea, sentimientos no resueltos o mal reparados porque hubo una ruptura en la relación. No permitan jamás que una relación llegue al extremo de la ruptura que destruye y desintegra es red de soporte emocional que da sentido a la vida: de la integridad de esa red depende el pronóstico de la salud, la enfermedad y la vida. Si no tenemos una red de relaciones íntegra, nuestra susceptibilidad de enfermar o de morir es de 3 a 5 veces mayor , es lo que dicen todas las estadísticas.

Hay una definida relación entre la capacidad de curarse de una enfermedad grave y la calidad de relaciones que uno tiene consigo mismo y con otros. Dos estudios recientes sobre la evolución de algunas formas de cáncer- melanoma y cáncer de seno- demuestran cómo el reunirse periódicamente para compartir el dolor, la esperanza, la alegría, en un contexto de psicoterapia grupal de apoyo, puede duplicar la expectativa  de vida y mejorar la calidad de la supervivencia.

Si a mí en medicina, alguien me dijera: mire descubrimos un medicamento que duplica la supervivencia de los pacientes con cáncer de mama metastático o con melanoma metastático, – que son muy malignos -, yo les diría: ese es un médicamente imperial, eso es una revolución en la medicina, ya estaríamos hablando por prensa, radio y televisión. Bien, ese medicamento existe y es el soporte afectivo.

Suministramos esa poderosa medicina cuando restauramos el ritual de desarrollo. – aquí en el seminario taller se pasa alguien de primera fila y Jorge le extiende los brazos y se abrazan – empezamos el seminario dándonos un abrazo pero terminamos el seminario así, (la gira y colocándose detrás de ella la vuelve a abrazar colocando una de sus manos sobre la frente de ella), “yo te doy mi soporte, te puedes recostar en mi, en mi hombro, en mi corazón, me puedes sentir, puedes contar conmigo”.

Pero aunque no envuelvan a alguien en sus brazos, si ustedes le dicen desde su corazón -puedes contar conmigo, él ya se está soportando en ustedes, ustedes lo están amamantando con la esperanza, le están dando sentido a la vida, y el hilo para volver a tejer la integridad, que es un hilo de sentido. Podemos vivir de muchas maneras pero sin sentido es imposible vivir. Realmente por donde se nos reventó el hilo de la vida, en nuestra cultura es por el lado del sentido. El sentido no es verbal Se comunica con la mirada, desde el silencio, con la actitud, desde el acompañamiento, desde los actos, desde los hechos, desde la vida. “Por sus obras los conoceréis”; cuando con toda la vida decimos: “puedes contar conmigo”, estamos reconstituyendo el ritual de desarrollo. Y el ritual de desarrollo es el punto de partida de la vida; es lo que más necesitamos cuando nacemos y también cuando nos estamos muriendo,necesitamos silencio, acompañamiento, ternura, disponibilidad, es todo lo que necesitamos. Necesitamos un hombro donde llorar, necesitamos en quien soportar nuestro dolor; necesitamos un colchón amortiguador, para que nuestras caídas no sean tan duras.

Ese sentirse amado por Dios en todas las cosas nos lleva a una forma de oración: Es orar como si aquello que pedimos ya nos hubiera sido concedido. Es el llamado “Efecto Isaías”, una esperanza que ya es viva confianza; es el sentirse querido por Dios; ya sea por Dios Padre, por el Dios que también vive en tu padre o en tu amada, en tu hijo o en tu terapeuta. No es posible de veras vivir sin la experiencia del amor: el sentirse amado es el alimento esencial de la vida.
Así que entramos en el mundo del soporte interior:
Un mundo de amor que va naciendo del ritual de desarrollo y se prolonga en la amistad, un amor incondicional desde el que se construye la libertad. Ese es el territorio del poder, que conquistamos cuando el guerrero convertido en bienhechor, ha descubierto, en la derrota de su ego, el sagrado misterio del dar para construir interior el templo sagrado del amor. En ese templo se restaura la integridad de un amor que no posee, que no reclama, que no depende nunca de nadie, porque sólo se soporta en el dar. Nacemos al gobernante que puede distribuir los bienes de su reino con la ayuda del mago, que aplica la magia distributiva de quien da a cada quien según su necesidad. Todo su dar es un don del amor, toda su ciencia conduce a la sabiduría del sabio que sabe que vivir es el arte de ocupar el propio lugar para ejercer el rol que a ese lugar corresponde. El gobernante se hace sabio y fluye en la alegría de esa levedad que asciende desde un soporte que sostiene sin amarrar. Y de nuevo ese soporte es de la esencia del amor incondicional de donde brota toda auténtica amistad. Por las puertas de la amistad entramos al corazón;,conmovidos desde el corazón, recorriendo el sendero del Guerrero y el Bienhechor, encontramos en la derrota del ego la conquista del reino interior.

La primera gran expansión de conciencia es el acceso al gobierno del cuerpo físico, el primer reino que conquistamos en el camino de regreso al Ser. Tomamos posesión de nuestro cuerpo, entramos con reverencia al templo interior, cuando lo conocemos. Cuántos mensajes cifrados del cuerpo que aún no comprendemos, ¿ cuántas enfermedades nacen de la ignorancia de las necesidades de nuestro instrumento? Una sinfonía de interacciones moleculares, atómicas, electrónicas, un concierto de fuerzas y energías, un paisaje estrellado de neuronas como un cielo interior en un cerebro que aún no hemos estrenado. Ese cuerpo es el patrón de organización de la energía y la información: es un espacio donde han quedado grabada las huellas del tiempo. El cuerpo es el cauce en el que se mueve una conciencia, que lleva el plan de la vida hasta la última de las células.

El gobernante comprende que su cuerpo físico, el territorio de su reino, no es la esencia de su realidad: ese territorio externo es apenas el escenario de múltiples interacciones que expresan el nivel de la conciencia. Sobre la unidad física, el escenario, se reflejan siete notas fundamentales, o siete colores: cuatro colores sutiles, que se llaman los cuatro éteres y tres colores más densos que son, el sólido, el líquido y el gaseoso. Pero este cuerpo que vemos apenas es la sombra de ese doble que llamamos, el doble etérico.
Empezamos entonces a acceder a la sanación, al mundo del color, del sonido, al mundo de la circulación del prana; empezamos a leer los órganos en otro sentido; empezamos a ser conscientes de que nos nutrimos, no solamente de cosas materiales sino que también, por el polo neurosensorial, nos alimentamos del Sol, del aire, del prana del mar, del prana de la naturaleza; comprendemos que somos responsables del cuerpo de la tierra que también tiene un cuerpo etérico, en el seno del cual tenemos la vida y que si destruimos la tierra estamos destruyendo nuestra vida. Nacemos, desde el punto de vista energético, a otro tipo de ecología que aparece cuando hemos tomado posesión de nuestro instrumento y podemos ser maestros de nuestra energía.

Posteriormente, llega el momento en que tomamos posesión de nuestra energía emocional: ese momento es sagrado, se le llama la Segunda Iniciación. Nacemos a nuestra humanidad cuando nacemos a nuestra energía y tomamos posesión del templo de nuestro cuerpo. Avanzamos en nuestro proceso de humanización cuando controlamos las emociones, cuando el jinete controla el caballo, cuando controlamos nuestros impulsos, cuando no somos sus víctimas sino que utilizamos la bestia, los impulsos, como el caballo alado, es decir: cuando lo tomamos como lo mejor de nuestra fuerza y le damos la dirección de nuestros pensamientos. Eso quiere decir cuando el sendero del científico y el sendero del místico se encuentran en nuestro quinto centro, es decir: el corazón asciende a la cabeza, la cabeza desciende al corazón y en el camino de encuentro entre los dos, surge la palabra creadora, la palabra iluminada, nace un creador porque es dueño de su magnetismo.

El hombre tiene un potencial magnético enorme, ese potencial magnético, emitido por su corazón puede trasformar la vida si tiene amor con discernimiento.
El poder que adquirimos es amor más discernimiento, es amor luminoso; ya no es amor ciego, el amor ciego puede ser un peligro mayor. De amor estamos enfermos, de amor se enfermó esta naturaleza, el amor sobreprotector, el amor condicionado, el amor condicional, el amor del mercenario: todas estas variedades de amor han creado nuestra cultura y nuestra civilización. Es decir, que “por amor”, como consecuencia de eso que llamamos amor, que son apegos y enamoramiento, estamos destruyendo el planeta.

Pero cuando accedemos a un amor pleno de luz, a un amor pleno de discernimiento, empezamos a controlar nuestras emociones y ascendemos al segundo piso de nuestro poder; al segundo nivel de nuestro poder, que es el control emocional, a eso lo llamamos, la Segunda Expansión de Conciencia, o la Segunda Iniciación. Ya estamos de este lado, ya no estamos del lado izquierdo en que descendíamos, ya empezamos a ascender a nuestro origen. Empezamos el Sendero de Retorno, el Sendero del Hijo Pródigo, el Sendero de Regreso a la Casa del Padre.
Descubrimos en ese poder emocional, el orden implícito, de un océano de sensibilidad. Ya no somos las olas, ya no estamos a merced del viento; ahora podemos profundizarnos en nuestro propio océano, para conquistar la serenidad, una condición sanadora que brota del alma.

Jorge Carvajal