Páginas

martes, 14 de abril de 2009

el Sentido de la vida

Quisiera compartir esto contigo con la intensidad con la que lo vivo:

No pretendo que el problema de la existencia pase desapercibido para ti. Como si por no percibirlo, ya no se sintiera. Lo que quiero compartir es algo más sincero que eso, viene de una Mente mucho más receptiva.
Lo que que quisiera compartir con mis hermanos es que hay otra forma de vivir la existencia, una visión que resume la percepción de forma unificada y que te ofrece una Experiencia sin contradicción y sin conflicto.

Quizá creas que he vivido algun tipo de misterioso proceso que está velado para la mayoría, o que me impuesto una profunda austeridad, una dolorosa disciplina, y que ahora acostumbrado a no tener necesidades personales no sufro de la condición humana. ¿Quièn querría infligirse tal castigo para liberarse? en tal caso casi sería peor el remedio que la enfermedad. Y honestamente, la mayoría de nosotros no deseamos elevarnos a un lugar donde se mire todo con neutralidad catatónica. Este no es el caso, porque no es el propósito. El miedo es a dejar de tener miedo y convertirnos en algo indistinto que no vive porque no siente el contraste y la gradación de las emociones. Esta no es la intención, porque no es el propósito.

Sin embargo, mientras toda nuestra energía esté enfocada en resolver nuestros problemas personales, en cumplir nuestros deseos humanos, te aseguro que las limitaciones no sólo no cesarán nunca sino que irán arraigándose cada vez más hasta parecer tener un sentido real, estar verazmente justificadas. Los argumentos nacen del deseo de mantener vivo un deseo. Aun las motivaciones más humanitarias y filántropas que te puedas imaginar, siguen viniendo del interés de cumplir nuestros sueños personales, la verdadera necesidad, es compartirse através de tu función real, que está alineada a la comprensión última de hacer la Voluntad del Padre, y extender la Conciencia todo abarcadora de la Filiación.

Ahora surge la respuesta más controvertida que se pueda dar al problema de la existencia: estar aquí no es necesari@. Y si el problema no es necesario, entonces la búsqueda de la solución tampoco. No hay necesidad de mantener el mundo en tus propios términos, no hace falta que hagas nada por sobrevivir, la muerte no tiene ningún significado trascendente y por ello no te impone que superes ninguna prueba más que reconocer que la muerte no prueba nada; lo que viene después es lo que había antes: Vida Luz Amor. No tienes que esperar. Puedes volver a Casa en cualquier momento, puedes quedarte aquí tranquilo.

Y quizá deduzcas ahora por ti mismo que no hace falta hacer nada, no tienes deudas que pagar, no tienes porque mantenerte, niégate a aprender a hacer y saber para lograr ser. No tienes necesidad, no tienes porque hacer... Pero, ¿quieres? entonces deja que sea hecho a través de ti, no te importe el resultado, y verás como todo se ajusta en la medida que te hagas más accesible al Poder que rige tu vida. Aunque es muy probable que aún no te hayas purificado lo suficiente como para mantenerte en la quietud resolutiva de la paciencia infinita, que obtiene resultados inmediatos, y prefieras hacer algo, trabajar, ir venir, viajar, disfrutar del tiempo. Es igualmente loable, eres libre! Y comprendido esto, no se te pide nada, más que no creas que tienes razones para estar resentido y no percibir que cada cosa que realizas es una forma de Gracia, un milagro que extiende la Creación dentro de la existencia.


No hay mayor Poder que el de la Felicidad del Ser; tu función es expandir Su conciencia siendo feliz. El sentido de la vida, no es limitarse a un sólo sentido, sino diseminar en todas la direcciones de la existencia la Felicidad de Ser.

No hay comentarios: